lunes, 20 de julio de 2009

El suegro de César Nava ha sido beneficiado con recursos públicos


El próximo líder interino del PAN, César Nava Vázquez, tiene como suegro a Emilio Baños Urquijo, director de Nuevos Negocios, Grupo Básico Mexicano SA (GBM SA), empresa denunciada penalmente por Andrés Manuel López Obrador de beneficiarse con un subsidio aprobado en 2003 por Felipe Calderón, quien entonces era el director de Banobras.

El empresario está casado con la titular del Instituto Nacional de Migración, Cecilia Romero.

El 15 de junio de 2009, el presidente legítimo denunció que GBM SA recibió casi 400 millones de pesos en agosto de 2003 cuando Calderón encabezaba el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos.

Información publicada por El Periódico detalla que a pesar de las denuncias, no existe alguna investigación por parte de la PGR o la Secretaría de Función Pública, por lo que Baños Urquijo y su GBM SA continúan la multiplicación de sus millones por la vía los recursos públicos, con la firma de nuevos contratos de obra con el gobierno federal.

"En los registros públicos de la Administración Pública Federal, GBM SA sólo aparece como un gran contratista hasta el año 2001, ya en la era panista, cuando comenzó a realizar obras que representaban recursos superiores al millón de pesos: rectificaciones de tramos carreteros, construcción de puentes y viaductos y supervisión de obras", subraya el rotativo.

Señala que el contrato más reciente, que fue por más de 6 millones de pesos, "le fue concedido en julio de 2008 por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) por un estudio de impacto ambiental, análisis costo-beneficio y revisión integral del Proyecto Ferroviario Matamoros-Brownsville y el Proyecto Ejecutivo del Puente Internacional que unirá a esas ciudades. Antes, GBM SA realizó para la misma SCT labores de supervisión de proyectos y obras de mejoramientos de caminos que le reportaron casi 3 millones de pesos".

Algunos representantes de las empresas que han concursado en las licitaciones que al final ha ganado, consideran que el "el mundo de las licitaciones es casi insondable para quien no está en la jugada", pues afirman que la relevancia de los proyectos que ha ganado Baños Urquijo más que económica es política.

"Los estudios de impacto ambiental y la revisión de obras, dicen, son casi una guía técnica que define qué empresa debe quedarse con el megacontrato, éste sí con decenas de millones de pesos de por medio, de un paquete carretero y ferroviario para la zona fronteriza de Nuevo León y Tamaulipas, que se anunció el 2 de junio pasado. Ahí, Baños Urquijo y compañía llevan la mano, para ellos o para algún aliado", afirma El Periódico.

Y agrega que "según el concurso público 9076-003-09, se trata de una concesión para construir, operar, explotar, conservar y mantener por 30 años las autopistas y puentes internacionales que integran el sistema carretero conformado por las autopistas Cadereyta-Reynosa, Reynosa-Matamoros, el libramiento Reynosa Sur II y los puentes vehiculares internacionales Reynosa-Pharr, Matamoros III-Los Tomares y Brownsville-Matamoros, entre otros".

El periódico remata que "la cereza de ese pastel es la construcción del nuevo puente ferroviario internacional Matamoros-Brownsville, que junto con el resto de las obras representa una recuperación de las inversiones casi inmediata y recursos por tres décadas.

"Para la obra de los seis millones, el estudio del impacto ambiental del proyecto ferroviario Matamoros-Brownsville, la postura de GBM SA presentó un costo entre 50 y 70% más bajo que sus competidores".

0 comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comenatario